Marketing Político no es solo ganar una elección
04 DE NOVIEMBRE DEL 2020
POR JAIME BAILÓN
«…Ningún partido político ha presentado propuestas relevantes para este sector de compatriotas…»
Cuando escuchamos hablar de marketing pensamos en ventas. Pero el marketing no es solo vender sino, sobre todo que nos vuelvan a comprar una y otra vez. Lo mismo también podemos aplicar al marketing político. No se trata de que nuestro partido o candidato gane una elección, sino que pueda ser reelegido.
Lamentablemente los niveles de reelección en nuestro país son muy bajos lo que demuestra que no tenemos mercadólogos sino mercaderes de la política. Cambiar esta situación demanda utilizar la ciencia del marketing en la política electoral y esto exige tomar en cuenta dos elementos claves para el desarrollo de una estrategia sostenible en el tiempo:
1) Un buen producto.
2) Conocimiento de nuestro público objetivo.
En primer lugar, necesitamos un buen candidato con un partido organizado. Esto no es fácil de conseguir, pero tenemos que asegurarnos de tener gente no solo competente sino con un nivel básico de compromiso y honradez en el manejo de los asuntos públicos.
Y el otro punto clave es el conocimiento de nuestro electorado, aquí también la mayoría de partidos de todas las tiendas políticas no tienen una idea clara de quienes son sus votantes.
El Perú es mayoritariamente un país informal, más del 70% de la economía esta en este sector. Pero existe la idea equivocada de que todos los informales son ambulantes, cuando solo 1 de cada 10 compatriotas de este campo se dedican a la venta ambulatoria, el resto un tercio están dedicados a las labores agrícolas, otro sector importante está enfocado en el transporte público (taxistas, mototaxistas, choferes de combis) y un número significativo son trabajadoras del hogar. Ningún partido político ha presentado propuestas relevantes para estos compatriotas.
El conocimiento de los elementos claves del marketing, nos permitirá desarrollar una estrategia electoral que vea el triunfo de nuestro candidato como el principio y no como el final de una carrera política.
Jaime Bailón.